Los días pasan y el reto avanza, no voy particularmente sobrado de tiempo y la sensación es de no llegar a completarlo entero. Este desafío de pintura no es especialmente exigente en cuanto a tiempos y plazos, al final son minis que son para mi uso y disfrute y si no las acabo hoy, lo haré mañana, pero el tener que pintar un ejército de tipos iguales en diferentes poses cambiando pocos detalles hace que se me haga cuesta arriba, y si a eso le sumamos que intento aplicar los pocos conocimientos que he ido adquiriendo, me da la sensación que el final del reto está muy muy lejano. De todas maneras lo voy a intentar, que todavía queda mucho y los chicos amarillos ya son un puñado más.
Cuando hice la lista del ejército incluí esta unidad porque ya la tenía montada desde hace varios años, no existe un porqué más allá de eso, la suerte de la mini montada por alguna casualidad del destino, pero el Sargento me apetecía pintarlo por dos motivos:
El primero es por el tema de los cascos como indicador de grado dentro del ejército. En mi club casi todo el mundo jugaba en plata y gris, y los que no lo hacían tenían un ejército que no era Codex e iban a su rollo con estas cosas y es una cosa que siempre me ha gustado.
El segundo es por el escudo, simplemente me gusta cómo queda y es ideal para practicar con el símbolo del cápitulo antes de que lleguen los tanques con todas esas superficies planas que piden ser decoradas con esmero.
Para el pintado he seguido las mismas pautas que con la Moto de Ataque, de manera que la coherencia del ejército sea lo que tiene que ser, en este caso decidí que los retros tuvieran en las toberas un ligero resplandor azulado, para ello realicé un lavado de turquesa sobre la zona iluminada previamente y como me gustó el resultado lo dejé tal cual.
Y aquí, una foto de familia, espero que os gusten.
¡Magníficas compañero! Muy buen trabajo. Un saludo!
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Gracias por el comentario, me alegro de que te gusten
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